Es importante recordar que la palabra de Dios es la fuente principal de revelación y tutorial, y que cualquier mensaje profético debe ser examinado a la luz de las Escrituras.

en el MAGNIFICAT, expresa la alabanza a Dios y anuncia a Isabel y a todos nosotros también toda la magnificencia de Dios.

En la actualidad, aunque no hay videntes en el mismo sentido en que los había en el antiguo Israel, la importancia de la profecía y de la orientación espiritual sigue siendo relevante.

La figura del vidente ha tenido un impacto significativo en la historia y el presente. La Biblia nos enseña que Dios todavía habla hoy a través de sus profetas, aunque no necesariamente en la misma forma que en la antigüedad.

La Biblia nos presenta a los videntes como figuras importantes en la historia de Israel, transmitiendo la palabra de Dios, guiando al pueblo y advirtiendo sobre el juicio divino. Sin embargo, es critical discernir entre los videntes verdaderos y los falsos, y recordar que la palabra de Dios es la fuente principal de revelación y tutorial.

Sigamos buscando el don del discernimiento espiritual y estemos dispuestos a ser portadores del mensaje de Dios en un mundo que necesita desesperadamente la verdad y la esperanza que solo Él puede ofrecer.

Es importante recordar que la palabra de Dios es la fuente principal de revelación y tutorial, y que cualquier mensaje profético debe ser examinado a la luz de las Escrituras.

“Tomando Saúl tres mil hombres escogidos de todo Israel, fué en busca de David de los suyos, por las cumbres de los peñascos de las cabras monteses”

“Estos pasaron el Jordán en el mes primero, cuando había salido sobre todas sus riberas; é hicieron huir á todos los de los valles al oriente al poniente”

“Porque la profecía no fué en los tiempos pasados traída por voluntad humana, sino los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados del Espíritu Santo”

son niños sin educación, incapaces de inventar los mensajes de los que hablan; por tanto, han recibido los mensajes de la Virgen;

“Porque la profecía no fué en los tiempos pasados traída por voluntad humana, sino los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados del Espíritu Santo”

En algunas iglesias y denominaciones, existen personas que son reconocidas como profetas o profetisas, encargadas de transmitir mensajes e inspiraciones divinas al pueblo.

Los videntes en la Biblia poseían un don único ya que click for more info Dios comunicaba vívidamente con ellos y a través de ellos. Su fidelidad al escribir lo que veían ayudó a completar la Palabra de Dios tal como la tenemos hoy.